La importancia del consumo de fuentes forrajeras para el equilibrio de flora bacteriana del rumen del ganado

Muchas veces hemos encontrado productores de ganado haciendo una sustitución indebida de alimento voluminoso por alimento concentrado sin ninguna orientación técnica de un nutricionista. Cuales podemos plantear como puntos de argumento o discusión para evaluar y consultar.
Los costos siempre tiende a ser la medida de gestión de toma de decisiones pero muchas veces esta medida no esta adecuada a las necesidades. Al ser productores trabajamos con un ecosistema de seres vivo en conjunto. El ecosistema de los suelos, en combinación con sus pastos y la interacción animal, el ecosistema de los animales con el medio y el ecosistema o balance del rumen. Los bovinos son rumiantes, y este aunque para muchos es un concepto básico, para otro grupo de productores se conoce pero no comprende el término.
La evolución de los rumiantes, los clasifica no solo por tener los llamados 4 estómagos, si no por el proceso digestivo que realizan a diario donde pueden degradar los hidratos de carbono estructurales del forraje, como celulosa, hemicelulosa y pectina, muy poco digestibles para las especies de estómago simple o no-rumiantes. Básicamente un proceso inicial de ingesta y masticado, que inicialmente es rápido. Luego es regurgitado el bolo a la boca nuevamente para junto con la producción de saliva hecho el proceso de masticación y una mejor eficiencia de absorción de los nutrientes. Los forrajes generan naturalmente ese proceso por su concentración de fibra.
Que sucede cuando damos concentrado de más. Es decir, damos harinas, alimento concentrado comercial de forma descontrolada y no balanceada, ellos tienen presencia de grandes cantidades de carbohidratos rápidamente fermentables, esto hace con que el pH del rumen de los animales que consumen dietas des ese tipo se mantenga en valores más bajos (pH ácido), más favorable para que los microorganismos digestores de aminos y azúcares. Si el pH rumen caen mucho (abajo de 5,5) puede hasta tener una paralización total da digestión de fibra, por inhibición de actividad de los microorganismos que fermentan la celulosa y hemicelulosa. En breves palabras baja la capacidad fisiológica del animal como digestor de carbohidratos complejos con esos PH del rumen.
Por ello no solo el riesgo de una acidosis y sus demás consecuencias si no otro problema que muchas veces es que el ganado recibe alimento concentrado y el NO necesita ni para la ganancia de peso esperada ni para la producción de leche base ese concentrado. Entonces se sustituye un alimento de menor costo y mejor adaptado para el animal, por uno de mayor costo sin proporcionalidad en la dieta y las necesidades de energía y proteína para obtener resultados económicos factibles.

Fuentes: Milkpoint; fcv.unlp.edu.ar

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La Importancia del consumo de fuentes forrajeras